Es una forma de preparar cualquier verdura en una base perfecta para la cena o la comida del día. Puede que surjan ciertas dudas en relación con cómo hacerlo, si existe un orden o no a la hora de agregar a la sartén las hortalizas, qué combinaciones de alimentos son las más saludables en un salteado, o si los ingredientes deben tener una forma o tamaño de cortado determinados. Es normal hacerse esta cantidad de preguntas por lo que a continuación las responderemos todas.
La técnica del salteado
El salteado perfecto será aquel que otorgue a las verduras un determinado color dorado y tengan una textura no muy dura pero tampoco blanda en exceso. Estas características únicamente se conseguirán con el corte perfecto en forma de tiras o bastones finos y aportando a la verdura un golpe de calor intenso y momentáneo.
Consejos para un salteado de rechupete
- Otro punto a tener en cuenta es que muchas veces, cuando lavamos las verduras, no las secamos bien del todo. Esto puede dar lugar a que la textura de la verdura sea excesivamente blanda a causa de los vapores de agua que desprenderán a la hora de saltearlas y no es el resultado que queremos. Es necesario asegurarte de que están completamente secas antes de agregarlas a la sartén.
- Al mismo tiempo, es imprescindible no llenar la sartén o wok que vayamos a utilizar, con demasiadas verduras porque generará ese mimo efecto. Trata de utilizar una lo suficientemente grande como para poder cocinar la cantidad de verduras para dos comensales, en el caso de que hubiese más, hazlo en varias tandas.
- El mejor orden a seguir a la hora de agregar a la sartén nuestros alimentos es el siguiente. En primer lugar, las verduras, ya que suele ser lo que más tarda en hacerse; seguidamente las proteínas y por último los hidratos que ya hayan sido cocinados previamente. Después sólo quedará aderezar nuestro salteado.
El nombre de salteado procede precisamente del movimiento que se realiza con la sartén y que va de delante a atrás, logrando así que los alimentos utilizados salten unos encima de otros y el calor esté repartido entre todos ellos y evitemos quemarlos.
El aceite que mejor resiste las altas temperaturas propias de esta forma de cocinar es el aceite de girasol, aunque también puedes utilizar un aceite de oliva más suave o incluso el de cacahuete.
Si la técnica del salteado en un principio te resulta complicado puedes utilizar una espátula y evitar no llenar tanto la sartén, no queremos tampoco que se nos caiga nada al suelo y nos quedemos sin cenar.
Recipientes que puedes utilizar
El salteado es propio de Asia y se suele hacer en un wok que es un tipo de sartén especial para la realización del movimiento que requiere. Su forma permite precisamente que la temperatura sea alta y al mismo tiempo no se quemen nuestras verduras, aunque como ya se ha mencionado anteriormente, se puede hacer en una sartén común.
Si es una forma de cocinar que te interese y que te suela gustar, te recomendamos que te hagas con un wok, si por el contrario es algo que vayas a hacer cada mucho tiempo, no es necesario que la compres. Puedes utilizar una sartén más o menos ligera y con un fondo no muy grueso a ser posible, con las paredes medianamente altas y con un mango cómodo.
Las mejores verduras y frutas parta saltear
Las verduras son la parte principal de nuestro salteado y generalmente están entorno al 45% del plato. Puedes utilizar prácticamente cualquier tipo de verdura; desde zanahorias al brócoli, pasando por la remolacha. Puedes incluir setas de cualquier clase, soja, espárragos o incluso calabaza. Hay infinitas verduras así que ¡anímate a probarlas todas!
La berenjena, por ejemplo, no se recomienda excesivamente ya que suele absorber muchísimo el aceite y lo mismo ocurre con la alcachofa. A su vez, no se recomienda utilizar verduras o frutas que desprendan mucha agua o zumo, como es el caso del tomate. La manzana en cambio contribuirá mucho con el salteado y combinará a la perfección con las espinacas. La piña y el mango sin madurar del todo harán juego a la perfección con algo de cerdo, gambas o pollo.
El aderezo, salsas y aliños
Existen infinidad de formas de hacer que nuestro salteado sepa increíble. En los países asiáticos suelen utilizar la salsa de soja, el teriyaki o incluso el mirin pero ten excesivo cuidado ya porque tienen sabores muy fuertes que, si es la primera vez que las pruebas, pueden resultarte extraños. En cuanto a condimentos puedes utilizar el curry en pasta, aceite de sésamo, pastas de chile, jengibre rallado, leche de coco espesa o condimentos que sean más picantes, si es que te gustan.
Antes de sacarlos del fuego, deberás añadirle los condimentos que más te gusten y procura que se mezclen a la perfección sin que se lleguen a quemar ya que si has agregado condimentos en polvo lo más probable es que tiendan a quemarse y a amargar porque son muy sensibles.
En el caso de las hierbas aromáticas es muy recomendable que se añadan una vez se ha emplatado el salteado porque son extremadamente delicadas. Este es el caso de la cebolleta china, la menta, el perejil, la albahaca o el cebollino. No te olvides de rayaduras de piel de frutas como naranja, mandarina o limón.
Si quieres utilizar tomillo, salvia o romero, es mejor que lo frías en rama en aceite. El sabor permanecerá en ese mismo aceite y así no tendrás que estar jugueteando con las hojas en el plato.
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