Holandés bebé o panqueque alemán. Versión dulce y salada

Para 4 0.5€/pers. 265kcal/100g

El panqueque alemán se trata de una masa elaborada a partir de leche, canela y harina, para después verterla en una sartén a una determinada temperatura, en la cual se encuentra la mantequilla derretida. Y posteriormente, se hornea. Su aspecto nos hace la boca agua ya que el panqueque dentro del horno se tuesta y su aspecto es extremadamente esponjoso y delicioso. Después se le agrega zumo de limón y azúcar glas, lo que hace que esa esponjosidad se reduzca un poco, y ya solo nos queda devorarlo en rodajitas.

Este postre suele prepararse con toques dulces, pero también puede ser salado, pero lo importante es que no llega a ser un panqueque o tortita como tal, pero tampoco se asemeja a una crepe, pero queda con aspecto de un soufflé.

Preparación del holandés bebé o panqueque alemán

1. Comenzaremos precalentando el horno al máximo, en mi caso llega a 250º C, tiene que estar a tope de temperatura.
2. En un bol, batiremos un poco los huevos para después agregarles la canela molida, la harina de trigo y la leche. A continuación, batiremos de forma ligera, de tal forma que se integren todos los ingredientes, pero dejando que la masa quede algo grumosa.
3. El siguiente paso será derretir la mantequilla en nuestra sartén apta para el horno u otro recipiente apto para hornear. Nos aseguramos de girar bien la mantequilla por toda la sartén y por los lados para que toda la superficie esté cubierta para evitar que se pegue el panqueque.
4. Vertemos la crema o masa líquida en la sartén caliente y luego volvemos a colocar la sartén en el horno. Horneamos durante unos 12-14 minutos hasta que empiece a hinchar y que se vea un panqueque burbujeante y ligeramente dorado.
5. El siguiente paso será retirar rápidamente la sartén o fuente del horno y espolvoreamos el azúcar glas por la superficie, ayudándonos de un colador de malla fina. Después lo volveremos a introducir en el horno durante 2 minutos más para que caramelice.
6. Para finalizar, retiraremos el postre del horno y lo rociaremos con el zumo del limón. Recordad que al sacarlo del horno empezará a desinflarse, con lo que hay que tomarlo lo antes posible, recién hecho y bien calentito.

La opción salada es muy sencilla, ya que lo único necesario para elaborarla es retirar del listado de ingredientes el azúcar glas, que es lo que le aporta ese leve dulzor y el toque cítrico del limón.

Si lo prefieres, puedes servirlo con un poco de mantequilla de pera o mermelada. También puedes acompañarlo de un yogur, una ensalada de frutas o fruta fresca, tocino, jamón, salchichas, huevos (para la opción salada). Imaginación al poder, al gusto de cada casa.

Hemos trabajado 2 horas y 15 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

25 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
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Etiquetas: azúcar azúcar glass canela cocina holandesa harina huevos leche limón mantequilla zumo de limón

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